Una rampa completará la total accesibilidad entre el Casco Viejo y Solokoetxe

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Zona en la que se habilitará una nueva rampa

Los trabajos, que se prolongarán durante cuatro meses, complementarán a los ascensores que van a inaugurarse próximamente

Una rampa completará la total accesibilidad entre el Casco Viejo y Solokoetxe

El Ayuntamiento de Bilbao completará la accesibilidad universal entre el Casco Viejo y Solokoetxe ejecutando una nueva rampa entre el desembarco superior de los ascensores que van a inaugurarse en las próximas semanas y la calle Solokoetxe.

La nueva rampa sustituirá a la actual, que no cumple con los parámetros de accesibilidad, al tener una pendiente mayor del 8% y una anchura  máxima de 1,4 metros.

Es por ello que, de cara a completar el itinerario peatonal propiciado en gran medida por la construcción de los dos nuevos elevadores públicos, el Consistorio ha proyectado la ejecución de la nueva rampa. Esta discurrirá por el trazado de la existente, pero será más prolongada de cara a rebajar su pendiente (no superará el 8% de inclinación en ningún momento). Tendrá una anchura mínima de 2 metros y unos 70 metros de longitud, divididos en tres tramos con sus respectivos descansillos.

Para mejorar su aspecto y facilitar su mantenimiento futuro, se eliminará el césped entre la nueva rampa y la fachada del CEIP Solokoetxe. En este ámbito se colocará un pavimento drenante, manteniendo los árboles actuales.

Para la ejecución de la nueva geometría de la rampa será necesario demoler el muro actual, y levantar dos nuevos muros de contención. El primero tendrá una longitud de 26 metros y una altura media de 1,5; y el segundo tendrá unos 50 metros de longitud y una altura media de 2,5. Ambos serán de hormigón armado y aplacado de piedra.

Asimismo, se retirará la pasarela actual de acceso al instituto desde la rampa y se construirá una nueva de 1,5 metros de anchura, 6 metros de longitud y 8% de pendiente. La pasarela será metalizada con estructura de acero y un forjado de chapa relleno de hormigón. El acabado se resolverá con mortero impreso, igual que el de la rampa.

Las escaleras afectadas por las obras serán repuestas. En concreto, las obras de rampa y pasarela tienen un plazo de ejecución de unos cuatro meses y se invertirá en ellas 299.080 euros.